Por mi raza...
El domingo a medio día estaba programado en la Sala Nezahualcoyotl en CU, un concierto de la OFUNAM donde se iban a interpretar temas de Gershwin, de la Película "West Side Story" y la Suite de Star Wars.
Quedé de verme con mi amigo Rick y nos lanzamos al centro cultural de Ciudad Universitaria.
Llegamos justo en punto pero los boletos se habían acabado. ¡Cheil!
Pusimos en práctica el plan B, que era irnos al estadio a ver Pumas vs Cruz Azul, aprovechando que Rick le va al Cruz Azul y yo a los Pumas.
Andar por CU me trae una sensación peculiar, como de "orgullo culpable". El orgullo viene de haber pasado una gran época en la UNAM y la culpa por haberla dejado. Siento que los años que estuve debí haberlos aprovechado mas.
En fin, finalmente los Pumas perdieron y Rick tuvo que disimular su gozo al menos mientras salíamos del estadio.
Por cierto, hablando de aficiones y aficionados, en el estadio, cerca de nosotros había una pareja.
El sujeto tenía puesta con orgullo su playera del Cruz Azul y cuando cayó uno de los goles la afición Puma enardecida le arrojaba vasos de Cerveza (Vacíos sorprendentemente) como desahogo.
El sujeto estoico y resignado asumió las consecuencias de ir con la remera del equipo contrario a sentarse en frente de una de las aficiones mas hard core del país.
Fue su novia la que se volteó y arremetió con gritos y mentadas de madre contra la Ultra y la Rebel juntas.
Al ver esto el Rick sabiamente me comentó: "¿Por que siempre es la mujer la que se pone al tiro en estos momentos de obvia adversidad?"
Cuando cayó el segundo gol azul, seguridad del estadio fue a pedirle al sujeto que se pusiera su sudadera si quería salir en una pieza.
¡Ay, Universidad!, ¿Cómo no te voy a querer?
Quedé de verme con mi amigo Rick y nos lanzamos al centro cultural de Ciudad Universitaria.
Llegamos justo en punto pero los boletos se habían acabado. ¡Cheil!
Pusimos en práctica el plan B, que era irnos al estadio a ver Pumas vs Cruz Azul, aprovechando que Rick le va al Cruz Azul y yo a los Pumas.
Andar por CU me trae una sensación peculiar, como de "orgullo culpable". El orgullo viene de haber pasado una gran época en la UNAM y la culpa por haberla dejado. Siento que los años que estuve debí haberlos aprovechado mas.
En fin, finalmente los Pumas perdieron y Rick tuvo que disimular su gozo al menos mientras salíamos del estadio.
Por cierto, hablando de aficiones y aficionados, en el estadio, cerca de nosotros había una pareja.
El sujeto tenía puesta con orgullo su playera del Cruz Azul y cuando cayó uno de los goles la afición Puma enardecida le arrojaba vasos de Cerveza (Vacíos sorprendentemente) como desahogo.
El sujeto estoico y resignado asumió las consecuencias de ir con la remera del equipo contrario a sentarse en frente de una de las aficiones mas hard core del país.
Fue su novia la que se volteó y arremetió con gritos y mentadas de madre contra la Ultra y la Rebel juntas.
Al ver esto el Rick sabiamente me comentó: "¿Por que siempre es la mujer la que se pone al tiro en estos momentos de obvia adversidad?"
Cuando cayó el segundo gol azul, seguridad del estadio fue a pedirle al sujeto que se pusiera su sudadera si quería salir en una pieza.
¡Ay, Universidad!, ¿Cómo no te voy a querer?
Si mi corazón es azul y mi piel dorada...
Esa disposición femenil de enfrentarse al enemigo más grande es una de las razones del por que seguimos existiendo como especie.
Saludos,
Posted by
ChilliCoder |
3:52 p. m.
Recuerdo una vez que yo tuve que ir a decirles a unas chamacas (seguidoras de toros Neza) que se cambiaran de lugar en el estadio si querían salir con vida. ¿Será que la gente no entiende el nivel de peligro que implican la rebel y la ultra?.
Posted by
Eva |
5:08 p. m.
eso, como siempre habla mal de la aficion puma que en un alto porcentaje, parece que razonan con salva sea al parte.
Como siempre hay exepciones como usté y mi amigo CHáLY.
Alze la pata si usted está bailando!!
portero
Posted by
Anónimo |
6:30 p. m.