Alguna vez alguien me dijo, que una forma de disminuir los riesgos del conductor (Choques, robos, ponchaduras y accidentes en general) era llevando la efigie de un santito de preferencia dentro del coche. Ya sea en la guantera, colgado en el espejo retrovisor o ahí junto a la morralla, el santito se iba a encargar de protegerme a mí y al auto que manejaba.
Evidentemente no creo en eso, pero decidí hacer el experimento después de todo.
Llevo manejando el coche que traigo ahorita como 5 años, y hasta ahora le he dado un llegue, volado un espejo, me vandalizaron el otro espejo, se me han ponchado 3 llantas (aunque eso es culpa de las llantas chinas, no del santito), me han chocado, se le descompuso el velocímetro, se le descompuso el radio y me han dado un cristalazo.
El experimento funcionó, la efigie del santito no garantiza nada, créanme. (Aunque, ya le agarre cariño al desgraciado.)
Evidentemente no creo en eso, pero decidí hacer el experimento después de todo.
Llevo manejando el coche que traigo ahorita como 5 años, y hasta ahora le he dado un llegue, volado un espejo, me vandalizaron el otro espejo, se me han ponchado 3 llantas (aunque eso es culpa de las llantas chinas, no del santito), me han chocado, se le descompuso el velocímetro, se le descompuso el radio y me han dado un cristalazo.
El experimento funcionó, la efigie del santito no garantiza nada, créanme. (Aunque, ya le agarre cariño al desgraciado.)